¿Qué es el karma y cómo influye en tu vida según la numerología y el tarot?

Siempre he creído que el karma no es un castigo ni una recompensa, sino una forma en la que el universo nos enseña a crecer. Recuerdo que cuando era más joven, pensaba que muchas de las cosas que me pasaban eran “injustas”. Pero con el tiempo entendí que todo lo que hacemos, decimos o incluso pensamos, crea ondas que vuelven a nosotros.

En este post quiero compartirte cómo funciona el karma desde una perspectiva esotérica, y cómo herramientas como la numerología y el tarot pueden ayudarte a identificar esos patrones kármicos para transformarlos y mejorar tu vida.

¿Qué es el karma?

El karma es un principio universal de causa y efecto. Imagina que cada acción que realizas es como lanzar una piedra al agua: las ondas que se generan tarde o temprano vuelven al lugar de origen. Todo lo que das, recibes de alguna forma.

No significa que si haces algo “malo” recibirás un castigo inmediato, sino que el karma es más complejo: busca el equilibrio. Nos enseña a reflexionar sobre nuestras decisiones y a crecer a través de ellas.

Mi experiencia con el karma

Te voy a contar algo muy personal. Cuando tenía 20 años, pasé por una etapa en la que me costaba asumir la responsabilidad de mis decisiones. Me frustraba por las cosas que no salían como esperaba y culpaba al destino o a los demás. Pero un día, una amiga me enseñó a ver el karma de otra forma: no como algo que “te pasa”, sino como algo que tú creas.

Esa reflexión cambió mi perspectiva. Comencé a notar cómo ciertos patrones se repetían en mi vida: relaciones que no funcionaban, decisiones financieras equivocadas, conflictos con personas cercanas. Y me di cuenta de que todo estaba conectado con cómo estaba actuando yo misma.

Fue entonces cuando empecé a usar el tarot y la numerología para entender esos patrones y, poco a poco, transformar mi energía.

Numerología y karma: ¿qué lección necesitas aprender?

En numerología, los números nos revelan patrones energéticos y lecciones kármicas. Puedes descubrir tu número kármico personal sumando los dígitos de tu fecha de nacimiento hasta reducirlos a un solo número.

Por ejemplo, si naciste el 12/04/1990:

1+2+0+4+1+9+9+0 = 26 → 2+6 = 8

Cada número tiene una lección específica:

1: Aprende a ser independiente y confiar en tus capacidades sin imponer tus ideas.

2: Encuentra el equilibrio entre dar y recibir. Colabora sin perderte a ti mismo.

3: Expresa tus emociones y creatividad sin miedo al juicio.

4: Trabaja con paciencia y constancia para construir una base sólida.

5: Aprende a disfrutar la libertad sin caer en excesos.

6: Cuida de los demás sin olvidarte de ti mismo.

7: Confía en el proceso y busca respuestas dentro de ti.

8: Usa tu poder con integridad y equilibra tus ambiciones.

9: Aprende a soltar lo que ya no te sirve y practica la compasión.

Mi número kármico es el 9, y fue un gran descubrimiento entender que mi mayor desafío era aprender a dejar ir. Durante años me aferré a personas y situaciones que ya no aportaban nada a mi vida, y eso solo me mantenía estancada. Cuando finalmente empecé a soltar, sentí un alivio enorme y vi cómo otras cosas buenas comenzaban a llegar.

El tarot y el karma: ¿qué lecciones necesitas integrar?

El tarot es una herramienta maravillosa para reflexionar sobre las lecciones kármicas que estamos enfrentando. Algunas cartas, especialmente de los Arcanos Mayores, nos hablan directamente de karma:

• La Rueda de la Fortuna: Representa los ciclos de la vida y cómo todo lo que hacemos vuelve. Nos invita a reflexionar sobre los patrones que se repiten en nuestra vida.

• La Justicia: Habla de equilibrio y responsabilidad. Nos recuerda que nuestras acciones tienen consecuencias, tanto para nosotros como para los demás.

• El Juicio: Representa el cierre de ciclos kármicos. Es una invitación a perdonar, tanto a los demás como a nosotros mismos, y avanzar hacia una nueva etapa.

Recuerdo que una vez saqué El Juicio en una tirada personal cuando estaba considerando perdonar a alguien que me había hecho mucho daño. Esa carta me hizo reflexionar sobre cómo el resentimiento solo estaba bloqueando mi energía. No fue fácil, pero al final solté ese rencor y sentí que algo dentro de mí se liberaba.

Cómo transformar tu karma

Cambiar nuestro karma no significa borrar el pasado, sino aprender de él y actuar de forma más consciente en el presente. Aquí tienes algunas ideas para trabajar en tu karma:

1. Reflexiona antes de actuar: Pregúntate: ¿esto que voy a hacer suma o resta en mi vida y en la de los demás?

2. Perdona y suelta: El resentimiento es una de las cargas más pesadas que podemos llevar. Practicar el perdón te libera y abre espacio para nuevas oportunidades.

3. Medita con intención: Dedica unos minutos al día para conectar contigo mismo. Visualiza cómo quieres que fluya tu energía y repite afirmaciones positivas.

4. Haz actos de bondad: Ayudar a los demás sin esperar nada a cambio es una de las formas más poderosas de equilibrar tu karma.

Un ritual simple para equilibrar tu karma

Este es un ritual que hago cada vez que siento que mi energía está bloqueada:

1. Busca un lugar tranquilo y enciende una vela blanca, que simboliza la limpieza y el equilibrio.

2. Escribe en un papel algo que sientas que necesitas soltar: un hábito, un recuerdo, una emoción.

3. Quema el papel con cuidado mientras repites: “Dejo ir lo que ya no necesito y abro espacio para lo nuevo.”

4. Dedica unos minutos a meditar, enfocándote en lo que quieres atraer a tu vida.

Tu karma, tu elección

El karma no es algo que te suceda, es algo que tú creas. Cada decisión que tomas, cada palabra que dices, cada pensamiento que generas tiene un impacto en tu vida. Ya sea a través del tarot, la numerología o pequeños actos diarios, puedes transformar tu energía y avanzar hacia una vida más equilibrada.

Si quieres descubrir más sobre tus patrones kármicos y cómo trabajarlos, suscríbete a mi newsletter. Juntos podemos explorar cómo estas herramientas pueden ayudarte a crecer y a encontrar claridad en tu camino.

Con cariño,

Olivia